Para escuchar mientras cocinas:
Ohhhh ¡Qué bonita es la naturaleza!
Solo me faltó dar saltos por el monte cual cabra montesa. Pero... si al final voy a ser más de campo que las amapolas!!!
Como son las cosas, yo señorita "refinada" de ciudad, arrasando y llenando la cesta de castañas en un visto y no visto. Enganchada con zarzas, pisando cacas de vacas donde, por cierto, siempre estaban las castañas más gordas. Hablando a voces para saber donde nos encontrábamos porque, el segundo día, la niebla hizo que no pudiéramos ver a la distancia de un metro. Yo, educada en los "mejores" colegios de la capital del sur (Getafe), integrada entre castaños y pinos. Si es que... se veía venir.
De pequeña, durante las visitas al pueblo donde ahora vivo, me entretenía buscando caracoles entre las plantas de mi abuela. Me daban una carretilla de plástico y hasta que no la tenía medio llena no paraba. Siempre pensé que eran buenos para las plantas, así que los volvía a echar a la tierra, pobrecillas!
Más pequeña aún, uno de mis juegos favoritos era hacer casitas a las hormigas con piezas de construcción de madera. Salía al escalón de mi portal y, ahí en el suelo, colocaba las piezas en formas de castillos donde ellas podrían vivir, y aunque nunca querían entrar, no tenía escrúpulos para cogerlas y meterlas dentro!.
La edad nos va cambiando. Fobias y neuras convertidas en partes de nuestra personalidad.
Ahora no aguanto las hormigas, los caracoles me dan repelus y odio a los gusanos zampacastañas!
He limpiado las castañas cuatro veces!!
Día 1- De la bolsa revisadas a un bol.
Día 2- Gusanos gordos en la encimera. Limpiamos y cambiamos a un cesto de mimbre.
Día 3- Gusanos gordos en el suelo!!! Vuelvo a limpiar.
Día 4- Pelo las castañas. Gusanos dentro poniéndose como el kiko los muy mamones!!!!
¡Qué asquito me han dado, de verdad! Entran pequeños y salen hechos unos bestias!!! ¡Qué mala leche!
Pero vosotros habéis entrado a leer esta receta tan original del #viernesdulce. ¿A qué si?
Garrapiñadas? Guau!!
Si es que la Mery últimamente tiene un nosequé quéseyo...
Pues no amigos, queridos fieles seguidores, espabilaos, y cocinillas. Yo quería hacer MARRÓN GLASÉ!!!!
Si es que la Mery últimamente tiene un nosequé quéseyo...
Pues no amigos, queridos fieles seguidores, espabilaos, y cocinillas. Yo quería hacer MARRÓN GLASÉ!!!!
Me pelé medio kilo de castañas, me leí 20 formas de hacer la receta, elegí dar un toque propio y sólo me quedaron unas 25...CASTAÑAS GARRAPIÑADAS! Feas como demonios! El resto desintegradas. A ver quién se atreve a fotografiar tal estropicio.
Saqué las que pude. Eso fue como el Titanic.
Pero bueno, Pocacosa llegó a casa y al ver las cosas castañas en la encimera, lo primero que hizo, antes de yo pudiese gritar un NOOOOOOO, fue llevárselo a la boca.
- Qué rico está esto! - me dijo
- Cuánto me quiere - pensé!
- 1/2 kilo de castañas
- 1 cucharadita de aníses verdes
- 1 vaína de vainilla
- peladura de 1 limón
- 1 rama de canela
- 2 vasos de agua
- 2 vasos de azúcar
Ingrediente secreto: Elegir bien si no quieres hacer puré. Válido para las castañas también. ;)
- Quitar la piel dura de las castañas. Para eso haremos un ligero corte en la punta y tiraremos de la piel hacía abajo. Me han preguntado el truco...Paciencia.
- Para quitar la pielecilla pegada a la castaña tenemos que poner agua a hervir y echar las castañas por un tiempo aproximado de 5 minutos.
- Luego dependiendo de como se haya desprendido la piel podemos pelar con la mano o con ayuda de un afilado cuchillo.
- En una cacerola echamos el agua, los anises. el azúcar, la canela, la vainilla y la peladura de limón.
- Llevamos a ebullición y añadimos las castañas.
- Cuando vuelvan a hervir las apartamos del fuego durante cinco minutos y volvemos a poner hasta que hiervan de nuevo. Repetir este proceso 10 veces.
- Tanto si has tenido la suerte de salvar la mayoría de tus castañas y tienen un color marrón transparente habrás conseguido hacer marrón glasé, como si por el contrario te ha pasado como a mi, y se te han deshecho la mayoría y no han absorvido bien el almibar haremos el mismo paso.
- Ponemos el horno a 150º y sobre una bandeja colocamos las castañas.
- Dejamos que se sequen dentro durante 25 minutos.
- Sacamos y dejamos enfriar.
- Comer!
Jajajajaja castañas y gusanos... que familiar me resulta... tengo una bolsa llena en la encimera, y las limpiaré hoy por la tarde...
ResponderEliminarOdio los gusanitos, en cuanto ves el agujero en la cáscara puedes prepararte para lo que vendrá... un gusano gordo comiendose mis castañas!!! Ajjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjjs
Pues a mi me siguen saliendo. Los odio!
EliminarPues vamos a intentarlo con mucho cuidado que parece que no resulta sencillo, pero por lo que vemos en la foto te han quedado genial!!
ResponderEliminarun abrazo y buen finde
Bueno bueno eso de genial...
EliminarHasta la palabra es horrible "gusanos", puargh pero claro las castañas son tan ricas que hay que entenderlos no !! A pesar de lo poquito que te quedo seguro que te quedaron muy ricas y ya sabes a por más. Beso.
ResponderEliminarPero tú sabes lo gordon que salen de las castañas?? Puuugggrrrrr
EliminarComo me he reído con tu desastre castañil, pero que sean feas las jodías no significa que no estén requetebuenas, es más yo diría que lo están... si las pillaran tus gusanos!!! Jajaja. Más bien... si yo las pillara!!!
ResponderEliminarBesos.
Raquel
Las castañas me chiflan pero nunca había oído lo de garrapiñarlas! Lo de los gusanos, ya sabes, gajes del oficio porque más de uno nos hemos comido alguno ;-)
ResponderEliminarComo se dice, lo que no mata engorda jeje!
He conocido tu blog a traves de Juana, y la verdad es que me ha encantado, así que me quedo por aquí y por tu instagram, que no quiero perderme nada!!
EliminarUn abrazo y buen fin de semana :) !!!
SI es que no hay puñado de castañas que no lleve a algun "habitante"... no, si tontos no son. Y a ver, desintegradas y todo deben de estar muy ricas!! Besos
ResponderEliminarPues habitantes ....más bien colonias!
EliminarNo hay cosa que mas me guste que ir a las castañas. De pequeña me pasaba horas por el monte, pero de aquella no había cazadores y lo tenía mas cerca. Y ahora solo puedo los fines de semana que es cuando las cuadrillas salen de caza y me da mucho miedo. Pero era feliz..........
ResponderEliminarEso si nunca he hecho castañas garrapiñadas, ni las he visto. Pero como saben tan ricas, seguro que así también.
Buen fin de semana
Belén, no te olvides que yo quería hacer marrón glasé pero la textura se me quedó como garrapiñada. A ver si luego va a venir un entendido del tema y comienza a echar pestes de la receta....Besos linda
EliminarQué ricas. A mí las castañas me encantan, sean como sean (pero sin bichitos sorpresa, eso sí, jajaja)
ResponderEliminarY lo de los gusanos me dio un repelús según lo leí...creo que fue también por el adjetivo "gordos"....puaggg...Por eso dejé de coger castañas...Aún así, siempre te encuentras alguno y da un repelús que piensas...vale, no abro ninguna más...Pero es tan grande mi vicio de castañas que, en seguida vuelvo a caer.
Tengo que probarlas garrapiñadas =)
Un beso dulce!
jajjajaja el cuanto me quiere me ha encantado!!!!!
ResponderEliminarSi, los gusanos son unos gusanos que se comen las castañas que tanto nos ha costado coger :(
pero bueno, después de todo te han quedado unas castañas de lujo, habrá que ponerse e imitarte :)
bsss (me encanta tu blog)
Ly, le he dado a mi padre el último medio kilo en una bolsa...y a que no sabes lo que me he encontrado en la cocina al día siguiente....??
EliminarGracias por tus palabras!