GRISINES A LAS SEIS DELICIAS

Para escuchar mientras lees: Need you now (Lady Antebellum)

 

Hoy la receta que os presento viene del blog amigo  Estoy cocinando. 

La receta de la masa es exactamente igual a la suya, no aconsejo cambios en esta porque realmente ha quedado maravillosa.Le prometí que los haría y aquí os los dejo.

Yo siempre he pensado que quien no ha sufrido lo que uno mismo no puede estar capacitado para dar ciertos consejos. Aún así los damos, aún así seguimos intentando que vean las cosas desde otro punto de vista: el nuestro. A veces, esos consejos, esos "yo haría..." sirven para minimizar parte del problema que nos invade pero....

¿Por qué a veces queremos exponer ciertos sentimientos? 

Creo que necesitamos empatizar, necesitamos que en ciertas ocasiones entiendan, sientan o imaginen el cómo y el por qué de comportamientos, acciones o sentimientos varios. Pero ¿qué pasaría si la persona en quien has depositado una mínima confianza transtoca tu esperanza en un ¿qué me quieres decir con eso??

Pues os diré a sabiendas lo que sucede. Es como si un barreño de hielos cae por encima, golpeando y enfriando cabeza, hombros, corazón y pies. Congela tus pensamientos y tu postura corporal. Pero al tomar conciencia de lo sucedido terminas deshaciéndote en lágrimas. 

Hay veces que no nos damos cuenta, que en determinados momentos de la vida, debemos pensar las palabras que salen de nuestra apreciada boquita aunque nuestra forma de pensar sea distinta a la que nos exponen. No hacen falta abrazos, ni besos ni siquiera consuelo. Simplemente se necesita que la persona que ha escuchado te entienda.

Pero hay algo de positivo en todo esto, si señor lo hay. Y es que cuando esto ocurre sientes una especie de colleja en la nuca diciendo : ESPABILA !! Y lo haces! Entonces las cosas comienzan a cambiar y se colocan en su sitio. 

Después de once años creyendo ser "parte de la empresa" te das cuenta de que eres igual que los demás. Y ahora que lo sé, mi comportamiento será como el de "una más" 

Gracias a mi jefe , por abrirme los ojos, por su falta de comprensión y delicadeza con ciertos temas. Te agradezco no haberme hecho esperar once años más para darme cuenta. 

Conociendo la verdad de las cosas, puedo reír o llorar , pero siempre será real.

Y yo he decidido (aunque te moleste, jefe) sonreír !

Chic@s disfrutad de los grisines!

RECETA PARA LA PANIFICADORA

• 275 ml agua tibia
• 3 cucharadas aceite oliva
• 1 cucharadita de sal
• 475 gr harina fuerza
• 1 cucharadita azúcar
• 1 sobre levadura seca panadería

LAS SEIS DELICIAS

• Pimienta-perejil
• Ajo en polvo-perejil
• Pimentón picante- Perejil
• Semillas sésamo
• Copos de avena
• Perlitas chocolate

Ingrediente secreto: Algún día llegará el momento esperado, cerraré la puerta de esta oficina y diré HASTA SIEMPRE.

1. En la cubeta de la panificadora introducimos por este orden la cantidad arriba indicada de : agua, aceite, sal, azúcar, harina y la levadura.
2. Ponemos en marcha en programa de amasado, el mío también tiene levado y como a ella dura una hora y media (panificadora Taurus) Si en el vuestro no tiene levado, dejar reposar hasta que doble el volumen.
3. En una superficie enharinada ponemos la masa y cortamos en seis trozos.
4. En cada trozo ponemos los sabores elegidos, arriba tenéis los míos. Amasamos para que se integren bien en la masa.
5. Cortamos cada trozo en unos 8  pedazos (no demasiado pequeños) y con éstos hacemos unas barritas de unos 20 cm de largo.
6. Los dejamos reposar en una bandeja con papel de hornear unos 20 min, yo no lo dejé más y pintamos con yema de huevo.
7. Calentamos el horno a 200º y se hornean (en mi caso) unos 15 minutos cada hornada.

NOTAS: Salen bastantes, y duran mucho en una bolsa de papel. Yo corté la masa en los seis trozos y los guarde en la nevera con papel de film toda la noche porque el tiempo no me permitió ponerme a hacerlo cuando la masa estaba preparada. Así que ya sabéis que podéis dejar la masa en la nevera y luego sacar 1 hora antes de su  manipulación para que sea más sencillo moldear.